Charlotte (Carolina del Norte), 25 nov (EFE).- Un mexicano en Carolina del Norte enfrentará un proceso de deportación al ser arrestado por alguaciles de este estado en las afueras de una iglesia católica por vender elotes sin autorización.
La detención de Carlos Ramírez, de 40 años, se produjo el pasado 15 de noviembre en la misa dominical en español de la tarde en la parroquia Nuestra Señora de Asunción, localizada en Charlotte, la ciudad más grande del estado.
El mexicano enfrenta cargos de invasión a la propiedad privada y desobedecer una orden de no ingreso al recinto religioso. Le fue impuesta una multa de 500 dólares. (N. del Blog: espero que la pareja que se metio sin invitación a casa Blanca con Obama, tambien sea juzgada y se le cobre multa mayor no?)
También las autoridades de Inmigración, a través del programa 287g, determinaron que permanece de manera irregular en el país y por consiguiente enfrentará un proceso de deportación una vez que se aclaren las faltas estatales.
Un testigo del incidente dijo hoy a Efe que el mexicano se encontraba en una bicicleta vendiendo mazorcas cuando fue cuestionado por un alguacil que terminó esposándolo.
Julia Rush, portavoz de la oficina del alguacil del condado Mecklenburg, indicó que se procedió al arresto porque aparentemente al mexicano se le había advertido que no podía seguir realizando ventas ambulantes en el templo religioso. (N.del Blog, y aparentemente no era guero ni de ojos azules ni alto fornido no?)
"Hablé con el padre y me dijo que no podía hacer nada porque allí se cumplía la ley que había dado de no venderse nada en la iglesia. (N.Blog sigue la Santa Inquisición?)
Agregó que él era la autoridad y estaba en su propiedad, y que era bueno lo que pasaba para que aprendiera a obedecer órdenes". (N. del Blog:se cree que seguimos en la colonia!)
David Reiser, administrador de la parroquia, dijo al periódico "Mi Gente" que varios vendedores de comida ambulante se juntan a la salida de la misa en camionetas, carritos y bicicletas para vender alimentos sin permiso sanitario.
"Esto se vuelve un desorden que se hace peligroso para los niños", afirmó Reiser.
Rolando Hernández, quien estuvo en la misma celda con Ramírez hasta hace unos días, contó a Efe que el mexicano cree que lo confundieron con otra persona porque era la segunda vez que trataba de vender su comida en esa iglesia.
"Es una injusticia porque el hombre no cometió ningún delito. Fui a hablar con el sacerdote pero no me recibió. Quizás debieron darle una advertencia pero no meterlo preso. Ahora lo van a deportar. No tiene nadie que lo ayude", añadió Hernández.
A través del 287g, en Charlotte han puesto en proceso de deportación a 2.117 en lo que va del año y sólo 728 por infracciones menores. EFE
N. DE B :quiere decir que quien subio la nota al blog, esta dando su humilde opinion personal, perdón por tanto comentario en la nota pero la verdad Me indignó!
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