“Déjenlo, déjenlo, no está poniendo resistencia”, pide un estudiante de medicina que presenció la agresión.
Antonio Heras, corresponsal
Publicado: 09/06/2010 23:13
Publicado: 09/06/2010 23:13
Tijuana, BC. La golpiza de agentes fronterizos que le costó la vida al migrante mexicano Anastasio Hernández Rojas fue grabada con una la cámara de video de un celular por un joven de 24 años de edad, residente en California, Estados Unidos.
¡Piedad, Piedad!, ¡Ayúdenme por favor…!, son los gritos que rompieron la cotidianeidad en la zona del cruce de peatones en la Garita Internacional de San Ysidro-Tijuana durante la noche del 28 de mayo.
“Déjenlo, déjenlo, no está poniendo resistencia”, advirtió en inglés y español Humberto Navarrete Mendoza, un estudiante de medicina en San Diego, el cual presenció el incidente que provocó la muerte cerebral, primero, y un día después del deceso del trabajador mexicano que vivió los últimos 20 años en el sur de California.
En el video apenas se aprecia el movimiento de los policías fronterizos, aunque el sonido es elocuente, ya que se escuchan las súplicas de la víctima cuando una veintena de agentes estadunidenses golpearon con toletes, puños y pies a Anastasio, y le infligieron descargas eléctricas hasta dejarlo inmóvil. Tres días después murió en el Hospital Sharp de Chula Vista por paro cardiaco.
El funeral de Hernández Rojas se celebró este miércoles en el condado de San Diego, ante una comunidad que exige que este asesinato no quede impune y se castigue conforme a las leyes de los Estados Unidos, pero que se castigue, señaló el procurador de los Derechos Humanos de Baja California, Heriberto García.
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