Presentan resultados de las investigaciones sobre los 60 componentes identificados
La Habana, 4 de octubre. El equipo de investigación del Grupo Empresarial de Producciones Biofarmacéuticas y Químicas (Labiofam) de Cuba presentó por primera vez públicamente algunos resultados
experimentales del estudio que realiza para confirmar las propiedades del veneno del alacrán Rhopalurus junceus en la terapia contra el cáncer. Durante el primer Congreso Internacional Labiofam 2010, el maestro en ciencias Alexis Díaz, especialista principal del equipo de investigación, mostró, entre otros, los siguientes reportes:
– Hasta 2002 se habían identificado cerca de 60 componentes del veneno, de los cuales hasta la fecha hay cinco confirmados con potencialidades antitumorales.
– De esos cinco, el más conocido es la clorotoxina, péptido de bajo peso molecular, capaz de actuar contra tumores cerebrales, sin dañar tejido sano.
– La investigación de Labiofam siguió tres líneas: a) la composición química del veneno; b) su desempeño al aplicarlo a líneas celulares sanas y tumorales, in vitro y en animales, y c) la combinación de la toxina con citostáticos convencionales. Proteínas, péptidos y aminoácidos
– La escasa actividad enzimática encontrada es una medida de la baja toxicidad del veneno, comparada con la ponzoña de otras especies de escorpiones.
– En los ensayos farmacológicos in vitro, el veneno del Rhopalurus junceus provocó un efecto citotóxico significativo en células tumorales de carcinomas y adenocarcinomas. No hubo reacción relevante en líneas tumorales de leucemias y linfomas.
– El veneno provocó la división del ADN en cada una de las células tumorales evaluadas, por lo que puede concluirse que es capaz de inducir la muerte celular por apoptosis (encogimiento y fragmentación), aunque la toxina también provocó la muerte de otras células cancerígenas por necrosis (lesión súbita).
– Fueron identificadas las fracciones de péptidos de mayor acción citotóxica contra células tumorales.
– El mismo ensayo de citotoxicidad se realizó en animales a los que se les implantaron tumores, sobre un modelo de adenocarcinoma mamario. El veneno se aplicó por vía intraperitoneal durante 10 días y evidenció una relación entre el suministro de la toxina y el retraso en la progresión tumoral, más significativa en las últimas dosis. En un tumor primario en pulmón, el veneno inhibió significativamente la aparición de metástasis espontánea.
– La inhibición de la progresión tumoral se logró en esos casos también al administrarse el veneno por vía oral, pero en este caso fue necesario elevar las dosis entre ocho y 12 veces, debido a las dificultades que representa la actividad enzimática del tracto gastrointestinal para las drogas proteicas y peptídicas.
Selectividad
– Por las dos vías, el veneno mostró que puede distribuirse en todo el organismo, por lo que es capaz de actuar en cualquier parte donde se localicen tumores primarios o metástasis, pero mostró una elevada selectividad hacia los tejidos tumorales en riñones y pulmones.
– El veneno se aplicó en sendas combinaciones con los antineoplásicos 5-fluorouracilo y cisplatino. En comparación con la terapia tradicional, fue posible disminuir las concentraciones de esos citostáticos para reducir al 50 por ciento el crecimiento celular y se inhibió la proliferación en menos tiempo.
– La combinación también se experimentó en animales, con un modelo de carcinoma mamario, esta vez se unió el veneno con ciclosfosfamida y luego con cisplatino. En estos casos se observó una inhibición significativamente superior de la progresión tumoral, respecto del tratamiento simple. Hay evidencia de que el veneno es capaz de potenciar el efecto de esos agentes antineoplásicos.
– Al combinarse la toxina con cisplatino, hubo una inhibición de más de 60 por ciento del crecimiento tumoral, respecto de la terapia simple. La misma combinación redujo los efectos tóxicos del antineoplásico tradicional.
------------------------------
--- La toxina del Rhopalurus junceus, especie endémica de Cuba, actúa en tumores y metástasis
--- El equipo de investigación de Labiofam propone que se realice el ensayo clínico a partir del extracto natural para buscar que el efecto se compruebe en pacientes humanos con neoplasias malignas
LA JORNADA por Clara Huacuja y Gerardo Arreola
La Habana, 4 de octubre. Una investigación in vitro y en animales confirmó que el veneno del alacrán Rhopalurus junceus, endémico de Cuba, tiene propiedades contra el cáncer, porque actúa contra tumores
y metástasis y aumenta la potencia de los antineoplásicos tradicionales, a los que reduce su efecto tóxico.
El equipo de investigación del Grupo Empresarial de Producciones Biofarmacéuticas y Químicas (Labiofam) de Cuba presentó por primera vez en público algunos resultados experimentales del estudio que realiza desde hace unos 10 años junto con otras instituciones científicas de la isla.
El maestro en ciencias Alexis Díaz, investigador principal del equipo, anunció a un auditorio internacional que la toxina representa una potencial alternativa terapéutica para el tratamiento de enfermedades neoplásicas en humanos.
Luego, Díaz dijo a La Jornada que el salto del estado actual de la investigación a la producción de un fármaco todavía llevará años.Tenemos que reproducir estos mismos experimentos, que fueron evaluados
con el extracto natural. Ahora hay que evaluarlos con cada uno de los principios activos identificados. Es una tarea muy compleja, aunque se haga en colaboración con importantes laboratorios. Además, al obtenerse por vía sintética, es decir, por ingeniería genética y biotecnología, sería un producto que va a tener regulaciones mucho mayores de las que requiere un producto natural.
Sin embargo, el especialista informó que el equipo ya ha propuesto un ensayo clínico a partir del extracto natural, para buscar que el efecto antitumoral se confirme en pacientes humanos con neoplasias malignas.
Reportes del estudio se divulgaron durante el primer Congreso Internacional Labiofam 2010, que se llevó a cabo del 28 de septiembre al primero de octubre, en La Habana, convocado por ese grupo empresarial y auspiciado por la Organización Panamericana de la Salud (OPS), los ministerios cubanos de Agricultura; Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente y Salud Pública, y el Instituto de Medicina Tropical
Díaz calculó que la autorización para el ensayo clínico podría ocurrir el próximo año. Esa decisión corresponde al órgano regulatorio cubano, el Centro Estatal de Control de Medicamentos (Cecmed).
Durante el congreso surgió una controversia sobre la conveniencia de usar en los ensayos el veneno total o bien trabajar con algunos de los componentes identificados con los efectos anticancerígenos.
Díaz señaló que el equipo trabaja con el veneno total, que tiene un componente analgésico tan potente como el antitumoral y el antinflamatorio y en la práctica es difícil combinar lo que ya está combinado por la naturaleza.
Además de realizar la investigación, Labiofam entrega gratuitamente el veneno diluido a los enfermos de cáncer que lo piden, debido a la amplia difusión que han tenido reportes empíricos sobre el impacto de la toxina en la mejoría de la calidad de vida de los pacientes.
Aunque Labiofam tiene criaderos del animal, su producción es insuficiente para atender la demanda espontánea, explicó al congreso el director de ese consorcio estatal, José Antonio Fraga Castro. La
única manera de poder abastecer y dar respuesta a esa demanda es con una producción industrial.
La acción antitumoral fue una nueva línea de trabajo en la investigación, después de que se habían confirmado las propiedades analgésicas y antinflamatorias del veneno.
Vimang y electromagnetismo
La toxina de esa especie se usa en la medicina tradicional en Cuba desde hace dos siglos, pero su aplicación antineoplásica comenzó hace unos 20 años en la provincia oriental de Guantánamo, impulsada por el desaparecido biólogo Misael Bordier.
En la investigación también participan el IPK, el Instituto Nacional de Oncología y Radiología y la Universidad de La Habana.
Otros productos naturales para combatir el cáncer presentados fueron el Vimang, inmunoestimulante preparado con la corteza del árbol del mango, descubierto por Eleuterio Páez, quien estaba ahí presente;
Ferrical, para elevar glóbulos rojos en la sangre; Acitan, fibra dietética antioxidante, y un yogur contra desórdenes nutricionales, formas distintas de reforzar el organismo y mejorar la calidad de vida del paciente.
Asimismo, se documentaron casos con resultados muy beneficiosos tratados con terapia electromagnética, que se conoce en distintas partes de la isla. En México se aplica en la Fundación para el Bienestar Natural, de Yucatán, con el equipo creado por el doctor Jorge Lakhovsky. Su director, Laurent Chabres, resaltó la importancia del congreso, que ofrece a los pacientes información seria y sustentada para que puedan tomar las mejores decisiones para tratar el mal que los aqueja.
Tratamientos contra el Cancer en Cuba
Excelente, felicitaciones por difundir esta terapia alternativa.
ResponderEliminar