Prolífico ensayista, autor de numerosas crónicas y columnas en los principales periódicos de la historia reciente, activista e irónico crítico del gobierno mexicano, falleció este sábado 19 junio, informaron varios de sus amigos. Tenía 72 años. Falleció en una clínica de la capital mexicana, donde permanecía internado desde hace dos meses por una fibrosis pulmonar que se le había diagnosticado un año atrás.
Se informó que sera velado hoy por la noche en Gayosso Felix Cuevas, por lo que se implementó un operativo de seguridad en el área , sin embargo de acuerdo a MILENIO, LA SECRETARIA DE CULTURA DEL DF, informa que las exequis se llevarán a cabo en el MUSEO DE LA CIUDAD DE MEXICO (Pino Suarez) a las 9 de la noche.
-----------------------------------
Caminos de un narrador
Carlos Monsiváis fue un personaje imprescindible para entender el México contemporáneo.
México, DF. Autodefinido como "un simple lector", el prolífico escritor mexicano Carlos Monsiváis, quien hoy sábado murió, utilizó como herramientas la inteligencia y la ironía y se caracterizó como una de las voces y plumas críticas y narrativas de la época actual importantes del país.
Personaje imprescindible para entender el México contemporáneo, Monsiváis se interesó por los más diversos temas; desde los más complejos, como el Movimiento de 1968, hasta personajes de la farándula como Mario Moreno Cantinflas o Pedro Infante, de quien se declaró admirador de su obra.
Sus innovaciones técnicas y la diversidad de registros que pueden observarse en sus textos, cambió la faz del género de la crónica de manera tal que ningún cronista mexicano posterior a él, está exento de su influencia.
Monsiváis, periodista, cronista, ensayista y narrador mexicano, nació en la Ciudad de México el 4 de mayo de 1938. Estudió Economía y Filosofía y Letras en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y desde muy joven colaboró en los más importantes suplementos culturales y revistas del país.
Se desempeño como secretario de redacción de las revistas Medio Siglo (1956-1958) y Estaciones (1957-1959). Ha hecho programas para Radio UNAM, como “El cine y la crítica", que se transmitió durante más de 10 años. Además de ser director de la colección de discos Voz Viva de México, de la máxima casa de estudios.
Monsiváis fue becario del Centro Mexicano de Escritores (1962-1963 y 1967-1968) y del Centro de Estudios Internacionales de la Universidad de Harvard (1965).
Su curiosidad universal, su eficaz escritura y su capacidad de síntesis le permitieron desentrañar los aspectos fundamentales de la vida cultural y política mexicana, por lo que gran parte de su obra se ha publicado en casi todos los periódicos del país o transmitido oralmente.
Sus crónicas, género que desarrolló con pasión, se han recopilado en diversos libros entre los que destacan Principios y potestades (1969), Días de guardar (1971) y Amor perdido (1976), este último basado en algunas figuras míticas del cine, la canción popular, el sindicalismo, la militancia de izquierda, los políticos y la burguesía mexicana.
De qué se ríe el licenciado (1984), Entrada libre, crónicas de la sociedad que se organizaEscenas de pudor y liviandad (1988) y Los rituales del caos (1995), (1987), son otras de sus crónicas sobre los más diversos temas.
También es autor del texto narrativo Nuevo catecismo para indios remisos (1982), además la biografía Frida Kahlo: Una vida, una obra (1992).
Entre sus ensayos se encuentran Características de la cultura nacional (1969) o Historias para temblar: 19 de septiembre de 1985 (1988).
También es autor de la selección y el prólogo de las antologías La poesía mexicana del siglo XXLos narradores ante el público (1969), A ustedes les consta (1980) y Jorge Cuesta (1986). (1966),
Carlos Monsiváis, quien puso el dedo en la llaga de las heridas sociales con la más fina ironía y la más dramática puntera, se convirtió en ojo crítico inexorable para comprender las manifestaciones culturales del momento.
Su potencia creativa que le otorgó a la crónica permitió que se le considere no sólo un subgénero o género menor, sino que fue revalorado en el ámbito literario en México.
De acuerdo con sus críticos, su obra tiende a un doble registro: los movimientos sociales y los grandes personajes, la política y el espectáculo, la cultura popular y la alta cultura.
Para el autor, esta doble vertiente es inexistente pues no hay verdaderas fronteras entre tales fenómenos y contextos. De hecho, ya en su Autobiografía (elaborada a los 28 años de edad), escribió: “acepté esta suerte de autobiografía con el mezquino fin de hacerme ver como una mezcla de Albert Camus y Ringo”.
El reconocimiento a su obra le llegó desde 1977, con el Premio Nalcional de Periodismo, por el género de crónica y a la fecha se cuentan alrededor de 33 galardones, entre ellos el Mazatlán por Escenas de pudor y liviandad, en 1988; Xavier Villaurrutia, en 1995, y Anagrama de Ensayo por Aires de familia: Cultura y sociedad en América Latina, en 2000. El último fue el doctorado honoris causa por la Universidad Autónoma de San Luis Potosí.
Sus aportaciones a la sociedad fueron múltiples, entre ellas el Museo del Estanquillo, que partió de su propia colección privada en el que lo mismo se le rinde homenaje a caricaturistas de la talla de Gabriel Vargas, con su famosísima Familia Burrón o Eduado del Río, Rius o bien a grandes genios del arte.
Su colección de más de 12 mil objetos que le llevó más de 30 años atesorarlos, le han permitido a este recinto realizar las más diversas curadurías donde la figura de Monsiváis siempre está presente de una u otra forma.
Entre sus más recientes trabajos literarios se encuentra el ensayo Yo te bendigo, vida, sobre la vida y la obra de Amado Nervo, publicado en 2002. Sin dejar de lado los innumerables cursos y conferencias que continúa impartiendo en México y el extranjero.
En marzo del presente año, presentó su más reciente libro, Apocalipstick en el que muestra a la Ciudad de México como una asamblea de lugares.
Entre sus aficiones, se encontraban sobre todo la lectura, los gatos que rondaban siempre en su domicilio de la colonia Portales, en la Ciudad de México y la cinematografía.
El escritor Adolfo Castañón, en su ensayo Un hombre llamado ciudad, lo considera “el último escritor público en México”, en el sentido en que no sólo cualquier mexicano lo ha escuchado o leído, sino que todos son capaces de reconocerlo en la calle.
------------------------------------
El cumple 72 de Monsi
Elena Poniatowska escribió en La Jornada este texto el 4 de mayo anterior a Carlos Monsiváis.
Hoy Carlos Monsiváis cumple 72 años. El año pasado fuimos a felicitarlo a su casa y a cantarle Las Mañanitas con un trío femenino y feminista de mariachis de sombrero más ancho que su falda y luego desayunamos con él en la avenida Tlalpan, a un lado de la calle de San Simón.
Caminamos a su lado y la gente lo paraba en la calle. “Si sigue así voy a caer en la autoindulgencia.” Tras de él avanzaba una cauda invisible: su madre, doña Esther, Beatriz y Araceli, su tía, quien fue ama de llaves de Artemio de Valle Arizpe, quien le daba permiso de llevarse unos libros a su casa; sus amigos de toda la vida, Luis Prieto, Sergio Pitol, José Emilio Pacheco, Fernando Benítez, Iván Restrepo, de la mano de Nelly; Francisco Toledo, Vicente Rojo, Rafael Barajas, El Fisgón; Jesús Ramírez, Chema Pérez Gay y Lilia, Rolando Cordera, Jenaro Villamil, Rogelio Naranjo, Eduardo del Río, Rius; Julio Scherer García, Ricardo Pérez Escamilla, Carlos Payán, Hugo Gutiérrez Vega, Neus Espresate, José Luis Ibáñez, 12 gatos con listones de colores en torno al cuello y las mil 500 personas que congrega cada vez que presenta un nuevo libro.
LEER MAS AQUI--------------------------------------
Si alguien le hace falta a México, es Monsiváis: Cristina Pacheco
Ante el impacto de la infausta noticia, la también escritora se declaró incompetente para hacer un análisis de la trascendencia de la portentosa obra que deja el ensayista.
Notimex
México, DF. Luego de conocerse la muerte del periodista, cronista y narrador Carlos Monsiváis, sus amigos expresaron su pesar por la pérdida de una figura imprescindible en el panorama cultural mexicano.
La periodista y escritora Cristina Pacheco señaló consternada que “la risa de Carlos aún resuena en mi memoria”.
Para Pacheco, la muerte de Monsiváis Aceves, el crítico irónico, el autor de numerosos libros que registran el devenir económico, histórico, social y político del país,“es una gran pérdida”
LEER MAS AQUI
-------------------------------------------
Para conocer más sobre la obra de Monsivais algunas de sus crónicas, ensayos, entrevistas y libros
Click en este LUGAR
Y SI TE GUSTA SU COLUMNA:
POR MI MADRE BOHEMIOS, AQUI LA ENCUENTRAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinión es importante, Nos interesa conocer tu punto de vista para retroalimentarnos y así aprender juntos. DEJANOS UN COMENTARIO PORFAVOR